Uno de los voceros y senadores de la colectividad señaló que se debe tener más tiempo para poder realizar el análisis técnico, profesional y social de una reforma con un ‘cambio tan drástico’.
El proyecto de reforma a la salud fue radicado ante el Congreso de la República finalmente el pasado lunes 13 de febrero por la ministra Carolina Corcho, la propuesta que tiene un total de 152 artículos e incluye el polémico apartado en el que se extienden una serie de facultades extraordinarias durante seis meses para el presidente de la República, ya fue desestimando por el Partido Conservador.
Así fue indicado por el senador y vocero de esa colectividad Nicolás Echeverry Alvarán, quién indicó la necesidad de un proceso mucho más largo para poder comprender la serie de reformas drásticas propuestas por el Gobierno Nacional.
“Como vocero del Partido Conservador en el senado tengo que ser claro y contundente frente a la Reforma a la Salud radicada ayer en el Congreso. Es imposible aprobarla así como está, para un cambio tan drástico se requiere un proceso largo de análisis técnico, profesional y social”.
Aunque no fue lo único indicado por el senador Echeverry, el vocero conservador realizó una invitación a los miembros de la bancada en el capitolio a rechazar el proyecto radicado por el Gobierno Nacional.
“Invito a bancada del Partido Conservador en el Congreso, a rechazar este proyecto de ley que busca reformar la salud de los colombianos. Nuestro país no puede retroceder en la prestación y garantía de un derecho fundamental como la salud. Hay que construir desde 0 y con objetividad”, trinó en su cuenta de Twitter.
De igual forma la Procuradora General Margarita Cabello cuestionó el poco tiempo para socializar la reforma y resaltó que: “reformas tan importantes, como la de la salud, ameritan una discusión y un aporte de la ciudadanía porque lo que está en juego es su vida, su dignidad y nada menos que su salud”.
Estas son las seis facultades especiales que tendría Gustavo Petro de aprobarse el proyecto
1. Establecer las disposiciones laborales a fin de garantizar las condiciones dignas de trabajo del personal médico en el país, “con estabilidad y facilidades para incrementar los conocimientos del talento humano en salud, tanto del sector privado como del sector público”. De hecho, este es uno de los puntos clave del texto presentado al Legislativo. El articulado propone que médicas y médicos del país recuperen su autonomía como profesionales y la autorregulación a partir de la evidencia científica y la ética.
2. El presidente tendrá capacidad para determinar las disposiciones laborales de los trabajadores públicos del sector salud “para garantizar el mérito”. De igual manera, podrá establecer las condiciones de reclutamiento y selección de los directores de las Instituciones Estatales Hospitalarias.
3. Instaurar los mecanismos y procedimientos “aplicables a las actuaciones administrativas y jurisdiccionales a cargo de la Superintendencia Nacional de Salud y el régimen sancionatorio que le corresponda aplicar”.
4. Modificar o añadir la reglamentación necesaria sobre la salud pública. En ese sentido, uno de los mecanismos centrales que fortalecerá la atención pública será la construcción de los Centros de Atención Primaria —CAP— que no solamente se encargarán de atender pacientes, sino que tendrán la función de organizar los territorios en aproximadamente 25.000 personas. Dichos lugares serán operados por entidades públicas, privadas y mixtas.
5. Otra facultad que tendría el presidente Petro dentro de los seis meses posteriores a la sanción de la reforma es la de constituir las disposiciones que sean reserva de ley para que se garantice un adecuado proceso de transición del Sistema General de Seguridad Social al Sistema de Salud, de acuerdo con lo establecido por la legislación actual y así garantizar —según el proyecto—, “garantizar el derecho fundamental a la salud”.