El inicio de este 2023 también llega con incremento en productos, servicios y trámites que afectarán la economía de los ciudadanos. De lo que subirá en Colombia, ¿cuáles serán los aumentos más fuertes en el país?.
El primer alza fue el de la gasolina, que para enero fue de 400 pesos y no de 200 como ocurrió en los últimos meses del año. También se elevó en $57 el precio del diésel.
Para Nidia Hernández Jiménez, presidente ejecutiva de Colfecar, esta alza “va a impactar todo lo que es el transporte de última milla, que se hace en vehículos pequeños y en motos, y adicionalmente en el tema del diésel, puesto que teníamos la promesa del presidente de que no se iba a incrementar el precio hasta mediados de este año”.
A lo que subirá en Colombia en 2023 se incluyen los hoteles y las aerolíneas, que deberán cobrar de nuevo el IVA del 19%, impuesto que por la pandemia se redujo al 5%. El ministro de Transporte, sin embargo, dijo que busca acuerdos con las compañías aéreas para un incremento moderado en los tiquetes para que no sean del 30 o 40% como se calcula.
El SOAT se incrementará en un 11,7% para los vehículos que estén por fuera de las categorías que cobija la tarifa diferencial del 50%. Asimismo, los peajes de Invías y los arriendos aumentarán con el porcentaje de inflación que revele el DANE en los próximos días. El alza de los alquileres se aplicará al momento de renovar el contrato.
En el sector financiero la tasa de usura en enero será del 43,26%, lo que quiere decir que ese porcentaje será el tope máximo que los bancos podrán cobrar como tasa de interés tanto para créditos de consumo como para tarjetas de crédito.
Por ahora no se conocen productos y servicios cuyo aumento estaba atado al salario mínimo y que pasarían a subir con base en la inflación que es más baja. El gobierno aclaró que ese cambio se hará a través del plan de desarrollo que será presentado al Congreso de la República en febrero y cuya aprobación se espera para mediados de año.
Algunos productos de la canasta familiar también han registrado un aumento, como la cebolla larga y la papa. No obstante, la carne y las frutas no han subido.
Pero puede que la comida se encarezca porque los restaurantes deben pagar de nuevo el impuesto al consumo de 8%, gravamen que se había suspendido durante la pandemia.