La Asociación Frigoríficos de Colombia (Asofricol) hizo un llamado de urgencia al presidente Gustavo Petro para que intervenga y evite una crisis mayor
Una fuerte advertencia hizo la Asociación de Frigoríficos de Colombia (Asofricol). Según esta, el alza del precio de la carne y las graves dificultades para su producción ya generan una crisis de seguridad alimentaria en el país.
Lo anterior, debido a factores como el alto costo del ganado, el aumento de las exportaciones de ganado vivo y la reducción de las exportaciones de carne bovina, lo que hacen cada vez más inviable la operación de los frigoríficos.
Está situación afecta no solamente los hábitos de consumo de los colombianos, quienes desde la última década redujeron el consumo de esta proteína y hoy dejaron de consumir tres kilogramos por habitante al año, sino que representa más de USD750 millones que dejan de ingresar a la economía del país y la pérdida del empleo de 9.760 familias que viven de esta actividad.
“El alto precio de la carne en el mercado nacional es un reflejo de varios factores, en especial del auge de la exportación del ganado en pie que, además de sustituir la exportación de carne con valor agregado a mercados como Asia y África, tiene un efecto especulativo en el precio de los animales, lo que afecta el ciclo ganadero e impacta el suministro y el precio de la carne para los colombianos”, explicó el presidente de Asofricol, Álvaro Urrea.
Según la organización, debido a la indiferencia del Gobierno pasado y la ausencia de una política del sector cárnico, se disminuyó en un millón de cabezas anuales el hato ganadero, lo que impactó la oferta interna de carne de res que, de no hacer una intervención inmediata, seguramente seguirá a la baja durante todo el 2023. Lo anterior, impacta a su vez en los precios al consumidor, quienes ven este producto como un lujo y que poco a poco desaparece de la mesa de los sectores más populares de Colombia.
En contraste, se observa un aumento de la exportación del ganado vivo, que incide en el alto precio de los animales que, de acuerdo con cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), aumentó en los últimos dos años en 56% y que impacta el precio de la carne al consumidor a crecer 84% en el mismo periodo.
Cabe mencionar que las exportaciones de animales en pie omiten el impuesto de degüello local, gravamen del Fondo Nacional del Ganado que tiene por objeto dar apoyo integral al ganadero, con lo que se impide la generación de miles de empleos necesarios para sostener la cadena de procesamiento, transformación, transporte y distribución que requiere el sector cárnico.
Intervención del Estado
Urrea señaló que hoy se está ante una emergencia en el sector cárnico que requiere la intervención del Estado. Señaló que, en los últimos meses, ante el incremento en la estructura de costos y la continua disminución del consumo de carne, se anunció la suspensión del servicio de los frigoríficos de Caucasia (Antioquia), Garzón (Huila) y Barrancabermeja (Santander), los cuales hicieron inversiones multimillonarias, cumplen con la reglamentación sanitaria y de protección al medio ambiente, generan más de 700 empleos directos y 2.800 indirectos, aportan a la industria nacional y pagan impuestos en el país.
“No podemos permitir que esta situación nunca antes vista, siga agravándose. La carne de res no puede convertirse en un producto de lujo para los colombianos”, puntualizó Urrea.
Es importante señalar que el alza de precios, presionada por la exportación de animales vivos, afecta a toda la cadena productiva, incluso al sector ganadero, lo cual causa preocupación porque también está presionado por el aumento del precio del ganado de reposición, lo que aumenta de esta manera la estructura de costos de todo el sector.
Así las cosas, Asofricol hizo un llamado al Gobierno nacional para que reglamente las exportaciones de animales en pie, se destinen recursos para hacer campañas de fomento al consumo y se articulen las instituciones de control en la lucha contra la ilegalidad para estabilizar de nuevo todo el sector cárnico, desde los ganaderos hasta las empresas exportadoras de carne para beneficio de este importante sector agroindustrial y permitirle a todos los colombianos que puedan comer nuevamente la proteína más apetecida del país.