El nivel de participación y el civismo demostrados reafirman la fortaleza de la democracia colombiana y los avances conseguidos gracias al proceso de paz, afirma António Guterres tras la elección de Gustavo Petro como próximo presidente de ese país sudamericano.
El Secretario General de las Naciones Unidas felicitó al pueblo de Colombia por el alto nivel histórico de participación en la segunda vuelta de los comicios celebrada ayer domingo para elegir al próximo presidente de la nación, donde fueron electos Gustavo Petro para ocupar la silla del ejecutivo y su compañera para la vicepresidencia, Francia Márquez.
En un comunicado emitido este lunes, António Guterres destacó la realización básicamente pacífica de las elecciones, aseverando que eso “reafirma la fortaleza de la democracia colombiana y el progreso logrado por el proceso de paz”.
“El Secretario General acoge con beneplácito el diálogo en curso para garantizar una transición armoniosa entre los gobiernos saliente y entrante”, agrega el texto.
António Guterres también refrendó la disposición de la ONU para trabajar con el nuevo gobierno y el pueblo colombiano en las prioridades compartidas de consolidación de la paz, promoción de los derechos humanos y desarrollo sostenible.
Gustavo Petro fue electo en segunda vuelta como próximo presidente de la República y estará al frente del país a partir del próximo 7 de agosto para el periodo 2022-2026, como sucesor del saliente presidente Iván Duque.
Petro fue guerrillero del desmovilizado M-19 y más tarde ocupó un asiento en el Senado del país.
La victoria de Petro fue posible con más del 50% de los votos a su favor, frente al 47% de los sufragios obtenidos por su opositor.
De acuerdo con las cifras oficiales, la participación en la jornada electoral alcanzó más del 58% de los 39 millones de votantes de Colombia.
La líder social Francia Márquez será la vicepresidenta durante el próximo mandato presidencial, convirtiéndose en la primera mujer afrodescendiente que ocupará el cargo.
El año pasado se registró en Colombia una serie de manifestaciones masivas para protestar por el aumento de la pobreza y la desigualdad.
Colombia y la FARC firmaron un Acuerdo de Paz en 2016. La ONU mantiene en el país una Misión de Verificación para vigilar la implementación de dicho Acuerdo, que incluye la reincorporación política, económica y social, así como las garantías de seguridad para los integrantes de la FARC, sus familias y para las comunidades.
El pasado 12 de abril, el titular de la Misión, Carlos Ruiz Massieu, presentó al Consejo de Seguridad de la ONU un informe que señala que el proceso de paz de Colombia tendrá éxito o fracasará en función de los esfuerzos que se realicen para poner fin a la violencia mortal a la que se enfrentan los excombatientes, los líderes sociales y los defensores de los derechos humanos
Pese a la continuación de la violencia en algunas zonas del país, tanto el responsable de la Misión de la ONU en la nación sudamericana como el presidente del país señalaron ante el Consejo de Seguridad que, en medio de tantas dificultades en el mundo, de tanta intolerancia y de tanta adversidad,el proceso de paz en Colombia es un ejemplo de cómo el mundo puedo resolver los conflictos mediante el diálogo.
El máximo órgano de seguridad y la misión en el país expresan preocupación por la persistencia de la violencia, los ataques contra excombatientes y una agresión a personal de la ONU, e instan nuevamente a hacer realidad en su totalidad el acuerdo entre el gobierno y las FARC-EP para instaurar la paz en esa nación.