Freddy Rincón, quien le dio grandes alegrías al país en el Mundial de Italia en 1990, se retiró de las canchas en 2004, tras jugar con la Selección Colombia 84 partidos, en los que anotó 17 goles.
Inició su carrera en el fútbol profesional en el Atlético Buenaventura con tan solo 17 años de edad, su gran velocidad y capacidad para anotar goles, partiendo desde la mitad de la cancha, hizo que la mirada de varios empresarios de la época centraran su atención en el joven
Tres años después, fue fichado para jugar en el Independiente Santa Fe en el que duró cuatro años en los que anotó 20 goles en 82 partidos disputados.
Gracias a su destreza, los cardenales lograron alzar por primera y única vez la Copa Colombia en 1989, luego de eso, pasó a jugar con la camiseta del América de Cali en donde tuvo la mayor cantidad de anotaciones, por lo que fue convocado por el Palmeiras
Luego de una mala racha en Nápoles, Rincón volvió a Brasil, en donde tuvo un buen tiempo y quedó inmortalizado en el salón de la fama de Corinthians en 2011, luego de ganar el trofeo del Mundial de Clubes en los años 2000, siendo capitán del equipo.
El 19 de julio 1990, cuando Colombia necesitaba un empate ante su rival, Rincón logró anotar el gol que les permitió clasificar a los octavos de final, en el minuto 90 + 2, cuando la esperanza ya se daba por perdida.
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